Licencia Creative Commons

Tuesday, October 28, 2008

LOS AVALES DEL ESTADO A LA BANCA EN 2009 Y EL INFORME RECARTE

El secretario de Estado de Economía, David Vegara, ha concretado que los avales que el Estado podrá conceder a la banca en 2009 tendrán un importe máximo para todo el ejercicio de 100.000 millones de euros, el mismo previsto para lo que queda de este año.

Una explicación de la magnitud de las cifras del "rescate", de su origen, evolución y previsible efecto en la solvencia de nuestras entidades se encuentra, anticipadamente porque el Informe es de Agosto de 2008, en el capítulo 12 del Informe de Alberto Recarte "La crisis financiera internacional y el crack financiero español":

"Según los datos que hemos expuesto, el sector promotor debe a la banca alrededor de 311.000 millones de euros. También sabemos que habrá alrededor de 1.200.000 viviendas nuevas sin vender a finales de 2008; ese número de viviendas puede tener, a precios de hoy, un valor de 160.000 millones de euros. De esta cantidad, un porcentaje pequeño estará soportado por los fondos propios de los promotores, pero la cifra es compatible con el endeudamiento global de 311.000 millones de euros del sector inmobiliario. El resto podrían ser préstamos para nuevas edificaciones diferentes a las viviendas, para la adquisición de suelo y para operaciones corporativas.

(…)

La banca está intentando, como hemos comentado, la refinanciación de las grandes promotoras, pero los pequeños y medianos representan, probablemente, más del 50% del total de esa cifra de 311.000 millones. Un enorme grupo de pequeñas empresas que entrarán en concurso de acreedores y de las que una buena parte acabará finalmente en quiebra. La situación, lógicamente, afecta a otros muchos sectores ligados al de la construcción y venta de viviendas, como el sector de electrodomésticos, el de muebles y similares.

(…)

¿Cómo afectará esa posible situación de concurrencia de acreedores a la banca? No sabemos, pero si los Fondos Propios del conjunto de entidades financieras que operan en España alcanzan en total 170.000 millones de euros y su financiación a largo plazo suma otros 50.000 millones de euros, esa es la cifra que tiene la banca española para soportar la actual crisis. No es imposible que los créditos en mora, por dificultades de los promotores, alcancen, si la parálisis de ventas continúa un año más, los 150.000 millones de euros.

(…)

Por esa razón hemos supuesto que de los 311.000 euros de crédito promotor pueden entrar en mora algo menos de la mitad, el 50%, lo que equivaldría a 150.000 millones de euros.

No he querido, ni podido, evaluar la posibilidad de que con la disminución del empleo total se reduzcan las necesidades de oficinas y naves industriales además de comercios. Si esto ocurriera los afectados podrían ser no los promotores sino las empresas puramente inmobiliarias, un grupo al que se considera seguro por parte de todos, analistas, inversores y banca. Pero si la economía española funcionara con sólo 18 millones de personas en lugar de con 20 millones, es evidente que también sobrarían otros tipos de edificaciones, además de viviendas.

Esos activos inmobiliarios, que ejecutarían los bancos que tienen garantías hipotecarias sobre esos créditos, por supuesto que tienen valor, no el que se les asignó en el momento de la concesión del crédito, pero sí, quizá, un 70% si se trata de viviendas y sólo un 25-30% si se trata de suelo urbano. Utilizo esos porcentajes porque las operaciones que se están formalizando en la actualidad se realizan con ese tipo de descuento.

Si con el paso del tiempo, tras tres, cuatro o seis años, la banca consigue vender las viviendas que se hayan adjudicado de los promotores por la ejecución de las garantías hipotecarias en un 70% de su valor crediticio y vender también suelo, aunque recuperando sólo un 30% del valor que se les atribuyó en su momento para otorgar créditos, podemos estar hablando de pérdidas totales de alrededor de 40.000 millones en la liquidación de las viviendas y de más de 60.000 millones en las ventas finales de suelo adjudicado. En total, alrededor de 100.000 millones de euros.

Este proceso de reconocimiento de pérdidas puede durar unos cuantos años. Desde la entrada en mora hasta la adjudicación en caso de insolvencia, o por adjudicación en los casos de concursos de acreedores, y su posterior traspaso a una compañía gestora de propiedad de las entidades financieras para su manejo pueden pasar varios años. Las pérdidas del sistema financiero podrían distribuirse a lo largo de 5 o 6 años.

Durante ese periodo la banca ganaría tiempo para poder generar beneficios en su actividad crediticia normal, con los que compensar parte de las pérdidas de su cartera de promotores.

Por otra parte, no hemos tendido en cuenta los efectos de los impagados de los promotores en otros sectores, como el de la construcción, que tiene unas deudas totales con la banca, cercanos, como hemos visto, a los 150.000 millones de euros.

Tampoco hemos considerado cómo va a afectar la recesión económica a los otros sectores económicos, el industrial y el de servicios. Muchos resistirán, porque están bien capitalizados, pero la falta de liquidez de la banca puede provocar suspensiones de pagos injustificadas de muchas empresas de estos sectores, que no podrán atender sus obligaciones con terceros si se les cortan los créditos para capital circulante; un hecho que ya es común y que está afectando gravemente a los sectores económicos que actúan al margen de los sectores promotor-constructor.

(…)

Estamos en el campo de la pura especulación, sin más datos que los que se derivan de valoraciones personales respecto a los cuáles van a ser los precios de las viviendas y el suelo y cuál va a ser la evolución económica española.

Es verdad que, en anteriores crisis inmobiliarias, como la de 1990-93, la banca recuperó la casi totalidad de sus préstamos tras ejecutar sus garantías hipotecarias y de otro tipo y de mantenerlos en el balance de compañías filiales o en el de empresas creadas al efecto, pero creo que la situación es, ahora, diferente. Nunca antes se había producido una burbuja inmobiliaria. Los precios de las viviendas de principios de los noventa podían estar hinchados, en conjunto, un 10%-20%, y el volumen total de viviendas adjudicadas por la banca era insignificante en relación con el actual. Y en cuanto al suelo, lo evidente es que, antes, en la anterior crisis, apenas había suelo y su precio nunca fue un problema. El suelo siguió siendo escaso. Nada que ver con los enormes excesos que existen en estos momentos. Por eso la situación de solvencia de la banca es tan comprometida.

Si eso fuera así, la banca se enfrentaría a pérdidas de 100.000 millones de euros en los próximos años. No es una cifra excepcional dada la gravedad del problema. Lo difícil es que, en este momento, los dos grandes bancos internacionales que tenemos, el Santander y el BBVA, son los únicos con capacidad para lograr recapitalizarse si lo necesitaran. El resto de los bancos, por su tamaño, y las cajas, por su especial régimen jurídico, tienen cerrada esta vía para recomponer su capital.

Si no se recapitaliza, nuestro sistema financiero arrastraría al real, pues los créditos tendrían que reducirse drásticamente, para acompasarlos a sus fondos propios y respetar los criterios de solvencia fijados imperativamente por el Banco Central Europeo, de acuerdo con las decisiones de Basilea. Habría que buscar una solución, pues una crisis financiera global de esa naturaleza provocaría una auténtica catástrofe.

Desgraciadamente, los problemas crediticios de la banca no terminan aquí. El crédito hipotecario por compra de vivienda durante los años de 2005, 2006 y 2007 también presenta características que los acerca a la categoría de hipotecas subprime españolas.

  1. Los precios que pagaron los compradores fueron muy altos en conjunto, en particular en lo que se refiere a la vivienda de venta libre.
  2. Los créditos hipotecarios concedidos a los compradores alcanzaron, en ocasiones, el 100% del valor de tasación.
  3. Desde entonces, es posible que esos precios se hayan reducido en, al menos, un 10% ó 20%, o incluso más.
  4. Esos créditos hipotecarios se concedieron a plazos muy largos, en promedio a 30 años y a tipos de interés variable, por lo que en 2008 y 2009 será mínima la parte de principal que se haya devuelto a la banca financiadora.
  5. En algo más de dos años el euribor ha pasado del 2% al 5,3% y su repercusión en las cuotas hipotecarias es muy grande.
  6. Simultáneamente, ha aumentado el IPC hasta situarse en el 5% anual y ha subido especialmente los precios de los alimentos y los combustibles, lo que afecta, directamente, a la capacidad de pago de los adquirentes de viviendas de menor renta de esos años.
  7. Ha aumentado sustancialmente el desempleo y se espera que se destruyan entre un millón y un millón y medio de empleos, lo que, nuevamente, afectará a los compradores de viviendas que las hayan comprado hace menos tiempo.

La actual morosidad del conjunto de la banca, que ha pasado del 0,2 al 1,5% en apenas un año, tiene que ver con el impago de cuotas hipotecarias de compradores de vivienda. La cifra de mora alcanza, hoy, los 22.000 millones de euros; según los expertos en esta materia, no sería extraño que esa cifra se doblara o incluso que aumentara hasta el 3,5%, lo que situaría la morosidad por este concepto en los 42.000 millones de euros que habría que sumar a la morosidad por demanda de los créditos a promotores y a resto de los sectores productivos.

En este caso, si la banca se ve obligada a ejecutar sus garantías hipotecarias, podría recuperar tras un largo periodo una cantidad superior, en porcentaje, a la que podría obtener de los activos ejecutados a los promotores. Pero en el entretanto esta circunstancia afectaría gravemente a la solvencia del sistema."

Alberto Recarte (La crisis financiera internacional y el crack financiero español)


Sunday, October 19, 2008

HERRAMIENTAS GRAFICAS SOBRE LOS MERCADOS BAJISTAS DE VALORES Y SOBRE LA ACTIVIDAD PRODUCTIVA FUTURA


















Los medios actuales permiten una comprensión rápida y adecuada de la tendencia e importancia relativa de los fenómenos objeto de consideración.

En cuanto a los mercados bajistas de valores, el gráfico interactivo del New York Times compara el mercado bajista actual con los que le han precedido y permite seguir su gravedad, evolución y duración.

Source:
How This Bear Market Compares
Amanda Cox, Xaquín G.V. and David Leonhardt
NYT, October 11, 2008
http://www.nytimes.com/interactive/2008/10/11/business/20081011_BEAR_MARKET


En lo que se refiere a la esperada actividad productiva futura, el Baltic Dry Index permite conocer cuál es la evolución esperada en función del movimiento de mercancías por mar:

The Baltic Dry Index is an index covering dry bulk shipping rates and managed by the Baltic Exchange in London. According to Baltic Exchange, the index provides:

…an assessment of the price of moving the major raw materials by sea. Taking in 26 shipping routes measured on a timecharter and voyage basis, the index covers Supramax, Panamax, and Capesize dry bulk carriers carrying a range of commodities including coal, iron ore and grain.

—The Baltic Exchange, in BalticExchange.Com

The index is made up of an average of the Baltic Supramax, Panamax, and Capesize indices. These indices are based on professional assessments made by a panel of international shipbroking companies. The index can be accessed on a subscription basis directly from the Baltic Exchange as well as from major financial information and news services such as Thomson Financial Datastream, Reuters and Bloomberg L.P..

Most directly, the index measures the demand for shipping capacity versus the supply of dry bulk carriers. However, since the demand for shipping varies with the amount of cargo that is being traded in the market (supply and demand) and the supply of ships is much less elastic than the demand for them, the index indirectly measures global supply and demand for the commodities shipped aboard dry bulk carriers, such as cement, coal, iron ore, and grain.

Because dry bulk primarily consists of materials that function as raw material inputs to the production of intermediate or finished goods, such as concrete, electricity, steel, and food, the index is also seen as a good economic indicator of future economic growth and production, termed a leading economic indicator because it predicts future economic activity.

La predicción de la actividad económica futura está a la vista del gráfico.

http://en.wikipedia.org/wiki/Baltic_Dry_Index

Monday, October 13, 2008

"BIS IN IDEM" MATERIAL Y PROCESAL EN LA CONTINUACION DE ACTUACIONES ADMINISTRATIVAS POR NO HABERSE APRECIADO LA EXISTENCIA DE DELITO FISCAL

ALGUNOS PROBLEMAS RELACIONADOS CON EL DELITO FISCAL

EL DESAPALANCAMIENTO FINANCIERO Y EL APALANCAMIENTO TRIBUTARIO

William Buiter ("¿Son los bolsillos fiscales suficientemente profundos para rescatar a los bancos?, Financial Times 13 de Octubre) apunta a la capacidad fiscal ociosa de los Estados-definida como el valor actual de sus superávits fiscales primarios corrientes y futuros- como a la clave para conocer qué Estados van a poder acudir a la misma para afrontar la brecha de financiación o solvencia del sistema financiero nacional respectivo.Se trata de una capacidad política de aumentar el ingreso o reducir el gasto que es mayor en los estados unitarios que en los federales.El Reino Unido y Bélgica están mejor posicionados que Alemania y Belgica.

La tensión entre la capaacidad fiscal ociosa y la brecha del sistema fiannciero nacional solo puede resolverse mediante la suspensión de pagos del gobierno nacional o la ayuda intrenacional.Según señala Buiter, antes de que finalice este año vamos a conocer qué Estados deben ser rescatados (internacionalmente) si su sistema finaciero nacional debe ser rescatado.

Cuando los Estados consideran el "apalancamiento" tributario, incluso en tiempos normales, suelen olvidarse de los derechos individuales de los contribuyentes.Cualquier política relacionada con la actual crisis va a tener que apelar al "crédito tributario" de forma más respetuosa y adecuada.Si se quiere evitar el "rescate internacional" por la falta de capacidad política pasada, presente y futura.

Sunday, October 12, 2008

ALTERNATIVAS A LA DEBIL RESPUESTA DEL G7 DESDE WASHINGTON A LA CRISIS FINANCIERA MUNDIAL

Este es un resumen de la reunión del G-7:

“The plan calls for banks to be recapitalized with public and private funds, but makes no specific mention of another common suggestion: Guaranteeing all interbank debt worldwide.”

"I think the finance ministers just failed a test, or at best got a C minus," said Paul Krugman, a Princeton University economics professor and New York Times columnist.

But Sherry Cooper, chief economist at BMO Capital Markets, said she thought the principles expressed by the G7 would reassure markets.

Economists have said they wanted the G7 to agree on measures including sweeping guarantees of bank deposits and interbank lending, as well as direct injections of taxpayer money to recapitalize ailing banks.

"They have to deliver the goods because the markets are just not going to stabilize unless they do," said Brian Hilliard, head of economic research at Societe Generale. "And the goods are government guarantees of deposits."

Ahead of the meeting, Ken Rogoff, a Harvard University professor and former chief economist at the International Monetary Fund, said there needed to be an "overwhelming" G7 statement.

"I think the worst thing to do would be to come out with a very tepid response," he said. "It would be the end of the G7."

"This is really the mother of all financial crises since World War II, and if the G7 leaders can't ... get it together and come out with a very effective statement, it is going to be a sad day indeed," Rogoff said.

With global equity markets plunging, the odds of coordinated action "are increasing by the hour," Hilliard said. "The gravity of the situation is just obvious to everybody."

Sobre la insuficiente y decepcionante reacción del G7 se ha extendido William Buiter en el Financial Times (11 de Octubre: “La débil respuesta del G7 desde Washington”).

Este es un resumen no literal pero fidedigno de su importante contribución y propuesta para los países del G-20.

¿Cuánta coordinación internacional se requiere?

Para luchar contra la crisis internacional, la coordinación y cooperación internacional es necesaria en ocho áreas.

(1) Garantías para la financiación interbancaria efectiva

Sin acuerdos internacionales acerca de las autoridades nacionales que garanticen los préstamos entre bancos domiciliados en diferentes jurisdicciones, solo los préstanos entre bancos del mismo país pueden ser asegurados. Ello reduciría enormemente la efectividad de las garantías para la interrumpida financiación interbancaria internacional.

Las garantías podrían prestarse por los Tesoros nacionales, por una agencia intergubernamental de compensación o por los Bancos centrales de los diferentes países.

Las exposiciones al riesgo de estas diferentes alternativas son muy diferentes y un conjunto claro de reglas internacionales debería establecerse para que pudiera funcionar.

(2) Garantías para otras deudas bancarias

Estas garantías (depósitos y otra deuda bancaria), se apliquen solo a las nuevas deudas o a las nuevas y a las antiguas,se verían muy reducidas si se restringen a las personas domiciliadas en el mismo país del banco garantizado.

(3) Recapitalización de bancos con actividad transfronteriza significativa

Un modelo para el reparto del coste fiscal de los rescates bancarios de instituciones con actividad en varios países sería muy beneficioso (Fortis, Dexia, etc).

(4) Rescates por países cuyos bancos tienen un déficit de solvencia que excede la capacidad fiscal del gobierno

No se trata solo del problema islandés. Hay países grandes con instituciones cuyo tamaño excede la capacidad fiscal de su gobierno.

(5) Conversiones obligatorias de deuda en capital

Una conversión de duda bancaria en capital, en orden inverso de antigüedad, reduciría el apalancamiento sin necesidad de inyecciones públicas de capital. Ello sería también excelente desde el punto de vista del riesgo moral.

Sin un acuerdo internacional sobre los tipos de deuda bancaria afectados y la fracción de cada tipo sujeta a conversión, la conversión obligatoria sería un fracaso porque estaría sujeta a la evasión y al arbitraje a nivel internacional.

(6) Evitar una competición hasta el fondo basada en el riesgo moral

Acuerdos internacionales son necesarios para evitar los problemas puestos de manifiesto por las decisiones irlandesas sobre garantía de depósitos bancarios. Sin ellos, el resultado final serían acreedores garantizados y contribuyentes defraudados en cada jurisdicción. EL FMI debería vigilar y hacer cumplir estas normas.

(7 Acuerdo sobre reglas comunes para acceder a las subastas de activos ilíquidos y para establecer métodos de valoración de los mismos

En otro caso, los mismos activos tendrían valoraciones distintas en cada jurisdicción con costes excesivos en los países ofreciendo la valoración más alta.

(8) Acuerdos internacionales en las reglas de valoración según Mercado y en cualquier desviación de las mismas

Par evitar mentiras de los managers de las compañías. Las consecuencias regulatorias de las distorsiones introducidas por la valoración pueden ser ajustadas de una manera internacionalmente coordinada.

Otras sugerencias valiosas para el G20

(1) No garantizar todas las obligaciones bancarias a cambio de nada

El esquema británico es el correcto ya que solo garantiza los nuevos instrumentos de deuda bancaria. La garantía de los antiguos no es necesaria para la nueva financiación. Y ello a cambio de ninguna expectativa futura par los contribuyentes.

Un quid por quo adecuado es nacionalizar cualquier banco cuyas deudas son garantizadas íntegramente.

(2) Afrontar los fallos del mercado directamente

Actualmente el mercado interbancario no funciona.

El Banco central debería interponerse entre los bancos en el interbancario actuando como contraparte universal. Podría prestar a tres meses sin garantía al tipo OIS más 50 puntos porcentuales y tomar depósitos al mismo plazo y al mismo tipo OIS menos 50 puntos porcentuales. Los bancos centrales no prestan sin garantía pero estos son tiempos interesantes e incluso los Bancos centrales deben hacerse mayores.

El Tesoro tendría que indemnizar al Banco central por cualquier pérdida relacionada con la financiación sin garantía como prestamista de último recurso en el mercado interbancario.

(3) Ahora es el momento de abordar el riesgo moral

Las inyecciones de fondos pueden hacerse sin preguntar o a cambio de acciones preferentes u ordinarias o incluyendo también un mecanismo de conversión parcial de deuda en capital e imponiendo restricciones sobre dividendos, recompra de acciones o remuneraciones de los ejecutivos.

La explosión de una crisis financiera es el momento ideal para abordar el riesgo moral de una manera inteligente.

(4) Aplicar las medidas a todas las instituciones altamente apalancadas no solo a los bancos

Fondos de cobertura, vehículos de inversion estructurada, fondos de capital privados y compañias de seguros como AIG con exposición a los derivados. Excluir otras instituciones destruirá el campo común de juego en favor de los bancos

(5) NO hacer la recapitalización voluntaria ni sujeta a retrasos

Un defecto del plan del Reino Unido es que no obliga a los bancos a cumplir con unos ratios mínimos de capital y máximos de apalancamiento inmediatamente. El colapso de confianza tienen lugar hoy y el capital hace falta ahora: los bancos no pueden conseguir el capital privado y el Gobierno debe recapitalizarlos. Respetar los deseos de independencia bancaria de los bancos daría prioridad a los intereses privados sobre las necesidades de estabilidad de todo el sistema. Las crisis de confianza se mueven con la velocidad de la transmisión electrónica de datos.

Una vez que los ratios se hayan alcanzado con las inyecciones públicas de capital, los bancos serían libres de atraer capital privado para devolver el capital público previamente inyectado, sujeto a unos mínimos necesarios por razones de control o de beneficios para los contribuyentes.

(6) Reducir el apalancamiento por medio de conversiones obligatorias de deuda en capital en todas las instituciones afectadas

Esta regla debería ser aplicada uniformemente por todos los miembros del G20.Podría restringirse a toda la deuda incurrida antes de una determinada fecha. Los accionistas quedarían diluidos como consecuencia de la conversión. Desde un punto de vista de riesgo moral se trata de un antídoto contra los cheques en blanco que algunos gobiernos cándidos han extendido.

William Buiter (Financial Times)

(traducción y resumen de Guillermo Ruiz)

Esta obra está bajo una Licencia Reconocimiento-No comercial-Sin obras derivadas 2.5 España de Creative Commons. Para ver una copia de esta licencia, visite http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/es/ o envie una carta a Creative Commons, 171 Second Street, Suite 300, San Francisco, California 94105, USA

Sumamente interesante y en una línea similar, pero referido sobre todo a Estados Unidos, es el trabajo del Luigi Zingales : Plan B

http://www.marketwatch.com/news/story/g7-outlines-broad-vague-plan/story.aspx?guid=%7B85B8381D%2DABE3%2D47A7%2DA33F%2D3020F3715EC7%7D


Thursday, October 9, 2008

LO QUE LOS LÍDERES DEL G7/G8 PUEDEN HACER PARA RESOLVER LA CRISIS CREDITICIA GLOBAL

Rescatando nuestros trabajos e inversiones

Con el propósito declarado de hacer propuestas concretas a los ministros del G7/G8 que se reúnen este viernes en Washington coincidiendo con las reuniones anuales del FMI y el Banco Mundial, un grupo de importantes economistas han preparado el documento “Rescatando nuestros trabajos e inversiones : Lo que los ministros del G7/G8 deberían hacer para resolver la Crisis Crediticia Mundial".

Estas son las principales propuestas:


  1. La crisis exige una acción coordinada a nivel internacional. Ningún país o grupo de países puede esperar solucionar la situación por separado.
  2. La acción coordinada debe referirse a medidas concretas y no a declaraciones de intenciones.
  3. La primera acción coordinada a nivel internacional es la de la recapitalización de los bancos. Todos los autores coinciden en que la vía adecuada para hacerlo es la de inyecciones públicas en el capital de los bancos, en la línea seguida por las autoridades inglesas. En realidad la ley americana recientemente aprobada también permite la toma de participaciones en el capital por el Tesoro americano y los autores abogan porque ésta y no la compra de activos dañados sea la medida a seguir.
  4. En Europa la revitalización del mercado interbancario entre entidades de los países miembros exige que las autoridades nacionales garanticen los préstamos recibidos por sus entidades en el interbancario percibiendo por ello una prima. Sin revitalización del mercado interbancario, la economía se desmoronará. Ya lo está haciendo.
  5. La garantía de los depósitos tiene relativamente menor importancia que la recapitalización, la reanimación del mercado interbancario y la vinculación de la inyección de capital público a la reanudación del préstamo bancario a las empresas. Su principal objetivo es evitar la agudización de la crisis por la retirada masiva de depósitos.
  6. El FMI debe establecer mecanismos de financiación para la recapitalización bancaria en determinados países.
  7. Como señala Barry Eichengreen si los ministros y líderes se limitan a las palabras sin hechos “los participantes en el mercado verán que los líderes nacionales no pueden ponerse de acuerdo en lo que es necesario. Y la espiral destructiva se acelerará”.Nos hundiremos juntos o nadaremos juntos.

Todavía hay quien no lo ha entendido. Todavía hay quien es víctima del “fetichismo de las instituciones” como versión actualizada del fetichismo de la mercancía y considera que son relaciones con cosas lo que en realidad son relaciones entre personas: el bien público del sistema de pagos y créditos, la coordinación que el mismo hace posible, la asignación de recursos, el mantenimiento de la riqueza. Todos ellos son relaciones entre agentes trabadas de forma que trascienden a cualquiera de los participantes y a todos ellos separadamente considerados.

El gobierno español ha anunciado medidas sin tener en cuenta lo anterior y sin una explicación detallada de lo que va a hacer en relación con los bancos. La improvisación está afectada por lo ya indicado. El capital de los bancos debería ser el objeto de las medidas y también la necesidad de que el préstamo fluya a las empresas porque de nuevo las entidades financieras solo cumplen su función cuando canalizan el crédito. Si no lo hacen es porque están paralizadas por el detenimiento del interbancario y porque están viendo como se erosiona su base de capital.

¿No podrían los “líderes” españoles examinar estas propuestas y empezar, junto con el resto, a olvidarse del fetichismo (o más bien pensamiento mágico) de los políticos?. Las relaciones políticas no son relaciones entre los políticos sino relaciones entre todas las personas y agentes sociales.

La política del espectáculo se ha acabado porque la realidad ya no espera a nuestros actores políticos. Pero tampoco nos esperará a nosotros.Ese es el drama de las relaciones políticas.


Sunday, October 5, 2008

LA EQUIVOCACION DEL G-4 Y LA NECESIDAD DE UN PLAN DE RESCATE PARA EUROPA

La prensa de hoy destaca el resultado de la reunión del G-4 (Alemania, Francia, Italia y Reino Unido): no habrá plan de rescate en Europa sino solo "acción concertada" ad hoc.

Wolgang Münchau explica detalladamente por qué esta solución es equivocada y por qué coloca a Europa en una situación sumamente peligrosa.Sería lamentable que el tiempo diera en breve la razón a él y a quienes han destacado la importancia de un plan conjunto.

Este es un resumen de su juicio:


"The Europeans are of course right in their overall ambition not to allow systemically important banks to fail. They are also right in their scepticism about their ability to distinguish between illiquidity and insolvency during an emergency. But I fear we are still well short of a strategy. We might be lucky, and scrape through what could well become the most dangerous month of the crisis so far. If, for example, the credit default swap market were to blow up in the next couple of weeks – a non-trivial probability – we have no plan.

(...)

The US plan failed to address the problem of an undercapitalised banking sector. That issue is even more important in Europe where many banks have an extremely weak capital base, with leverage ratios of 50 or more.

Europe does therefore not need any bail-out plan, but a plan that specifically addresses the capitalisation problem. Concretely, three things are needed: the first and most important is money. A sum of €300bn will not cover the EU in a worst-case scenario, but it is a sensible number to start with; secondly, you need a semi-permanent crisis committee empowered to take decisions; and finally you need a strategy to apply symmetrically and based on clear rules about when to recapitalise, and when not.

(...)

For Europe, this is more than just a banking crisis. Unlike in the US, it could develop into a monetary regime crisis. A systemic banking crisis is one of those few conceivable shocks with the potential to destroy Europe’s monetary union. The enthusiasm for creating a single currency was unfortunately never matched by an equal enthusiasm to provide the correspondingly effective institutions to handle financial crises. Most of the time, it does not matter. But it matters now. For that reason alone, the case for a European rescue plan is overwhelming."


"Una crisis bancaria sistémica es uno de los pocos shocks imaginables con el potencial de destruir la Unión Monetaria Europea".Se puede ser más duro, pero no más claro.


GRAFICOS DE LA CRISIS FINANCIERA



Especialmente significativo es el del tamaño comparativo...
Esta es la fuente

Wednesday, October 1, 2008

UN LLAMAMIENTO A LA ACCION: CARTA ABIERTA A LOS LIDERES EUROPEOS SOBRE LA CRISIS BANCARIA



"In the US, dealing with the immediate crisis requires restoring liquidity to money and credit markets, and creating the conditions for the resumption of the securitisation of prime mortgages and other illiquid but sufficiently homogeneous and transparent assets. In Europe, the key problem is high leverage among the internationally active large banks. Hence the EU contribution must be centred on a recapitalisation of the banking sector, through the injection of public equity or through mandatory debt-to-equity conversions. This has to be done at the EU level (e.g. through the EIB). The current approach of rescuing one institution after another with national funds will lead to a Balkanisation of the European banking sector. Agreeing a harmonised level for deposit insurance would also be important.

To prevent future crises of this nature, regulation of the European financial markets and institutions at the European level will also be required.

The problem is not a lack of understanding of how to stop financial crises. The problem is a lack of political will.

Unless European leaders immediately unite to address this crisis before it spirals out of control, they may find themselves fighting over how best to salvage the aftermath."